2020-11-04
El proceso de reubicación usualmente comprende mover no sólo al empleado por cuyas actividades laborales se debe mover a una nueva ciudad, sino a la familia completa, lo cual es uno de los retos principales de todo el proceso. ¿Pero qué pasa cuándo el movimiento es de regreso y se inicia la repatriación trayendo de vuelta a su lugar de origen a todos los que alguna vez se reubicaron? Pocas veces se considera la influencia que decisiones así pudieran tener en la familia y sobre todo, en los más pequeños.
La repatriación es uno de los capítulos más ignorados en los procesos de reubicación, pero es uno de los que puede tener mayores implicaciones en los hijos de los reubicados, pues ellos intentan asimilar de nueva cuenta los procesos y distintos entornos educativos de su país nativo. El choque entre las diferentes culturas de los lugares en los que ha vivido -sobre todo cuando son varios cambios en poco tiempo- hace que la repatriación sea el momento en el que los niños puedan requerir de mayor apoyo por parte de los adultos.
Por supuesto que los retos de estos procesos dependen de la edad de los niños y del tiempo en el que hayan permanecido fuera de su tierra natal. Para algunos que podrán no haber estado en casa por años, puede incluso parecerles extraño su país de origen, especialmente en casos en los que los niños se vieron reubicados a muy temprana edad o incluso pudieran haber apenas nacido semanas antes del movimiento. Según el estudio de IESE y EY, el 38% de la muestra señala que existe una gran diferencia cultural entre su país de origen y el país al que ha sido destinado.
Para cualquier caso, las organizaciones deben revisar sus políticas de repatriación: ¿Proveen beneficios para apoyar a los niños a mantener las habilidades y lenguaje de su país nativo aún estando fuera de él? ¿esto se da de manera automática o necesita ser solicitado expresamente por alguno de los padres? ¿se comunica al reubicado estas consideraciones antes de iniciar el proceso? De hecho, esas políticas son muy agradecidas por el reubicado. El 83.9% de la muestra del estudio antes mencionado, sostiene que ser seleccionado para el proyecto de expatriación supone un reconocimiento por parte de la empresa.
Un punto esencial, que quizás pueda ser la principal recomendación, es la comunicación: informarle a los niños lo más pronto posible de su repatriación, procurando que los padres sean honestos con ellos sobre cualquier inquietud o duda que puedan tener sobre la vuelta a casa. Manteniendo el diálogo durante todo el proceso se podrá tener una experiencia más llevadera, y no sólo con los más pequeños, sino con los niños de cualquier edad.
Sabemos que el proceso puede ser largo y detallado para que el proceso de repatriación sea un éxito. Recuerda que en Relocation Services somos tu apoyo antes, durante y después de la reubicación.
Obtenido de:
https://www.cartus.com/en/blog/repatriation-supporting-children-all-way-home/